Una micronación, también llamada a veces cibernación, país fantástico, modelo de país o proyecto de nuevo país, es una entidad que se asemeja a los estados o naciones independientes, pero no es reconocida por ellos, y la mayor parte existe sólo en papel, en internet o en las mentes de sus creadores. Las Micronaciones se diferencian de los movimientos de autodeterminación y de secesión en que son mayoritariamente vistos como entidades excéntricas y de naturaleza efímera, y a menudo creados y mantenidos por una sola persona o un pequeño grupo.
Algunas micronaciones han gestionado extender sus operaciones al mundo real, produciendo monedas, banderas, sellos postales, pasaportes, medallas y otros objetos. Tales elementos de estados soberanos reales han sido creados como modo de legitimar a las micronaciones que los producen.
El término micronación fue acuñado en los años 90 y designa los miles de entidades pequeñas y no reconocidas, similares a estados que han nacido desde entonces. El término también se utiliza para, retroactivamente, referirse a las primeras entidades efímeras y no reconocidas, algunas de las cuales datan de principios del siglo XIX.
Las micronaciones generalmente tienen varios rasgos comunes:
· A menudo aseveran que desean reconocimiento como estados soberanos, aunque no lo son.
· Son pequeñas; algunas reclaman control de territorios físicos de muy delimitada extensión, sin embargo la mayoría existen exclusivamente en el mundo on line. Mientras algunas micronaciones reclaman cientos e incluso miles de miembros, la gran mayoría no tienen más de uno o dos participantes activos.
· Algunas producen instrumentos de gobierno tales como pasaportes, sellos y monedas, y confieren títulos y premios. Raramente son reconocidas fuera de sus propias comunidades de interés.
Estos criterios distinguen a las micronaciones de los países imaginarios, villas ecológicas, campus, tribus, clanes, sectas, comunidades residenciales, asociaciones y zonas temporalmente autónomas, las cuales normalmente no pretenden ser reconocidas como soberanas. Las micronaciones también se distinguen de las entidades que tienen relaciones diplomáticas con otras naciones reconocidas del mundo sin ser formalmente reconocidas por otros estados ni aceptadas por organismos internacionales (como las Naciones Unidas), como por ejemplo la República de China (Taiwán). Por el contrario, las micronaciones no tienen relaciones diplomáticas con naciones reconocidas o asociaciones internacionales.
En la Ley Internacional, las dos escuelas más comunes de pensamiento para la creación del modelo de estado son la teoría declaratoria y la teoría constitutiva.
La teoría constitutiva fue el estándar del modelo de estado en el siglo XIX, y la teoría declaratoria fue desarrollada en el siglo XX para corregir deficiencias de la teoría constitutiva.
En la teoría constitutiva, un estado existe exclusivamente por el reconocimiento de otros estados. La teoría se divide en si este reconocimiento requiere “reconocimiento diplomático” o simplemente reconocimiento de existencia.
En la teoría declaratoria de modelo de estado, una entidad se convierte en estado tan pronto encuentra los criterios mínimos para el modelo de estado. Como las micronaciones no cumplen ningún criterio, no pueden ser consideradas estados soberanos, y no tienen legitimidad en las leyes internacionales.
El fenómeno micronación está estrechamente unido al desarrollo del concepto nación-estado en el siglo XIX, y las primeras micronaciones reconocibles datan de este periodo. La mayoría fueron fundadas por aventureros excéntricos o especuladores y algunas tuvieron un notorio éxito.
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